Tinder - venció la "plaga" de todos los servicios de citas: la gente se conoce y se va, ¡lo que no es bueno para el negocio! Tinder, en cambio, ha manejado este problema de forma brillante.
Una mezcla nuclear de psicología, mecánica de la industria del juego y un diseño adecuado hace su trabajo, convirtiendo el servicio en un asistente permanente de tu vida romántica.
No voy a hablarte de las Sorpresas Kinder. Aquí todo está claro: hasta que no lo abras, no sabrás qué hay detrás de la siguiente carta: un muerto o una gran opción. Es un elemento de juego que todo el mundo conoce.
Caja de Skinner
Esto es más interesante: Skinner metió a pájaros y ratas en una caja, por separado, claro, y les hizo apretar botones y les dio comida a cambio, en orden aleatorio. Así es como los animales formaron el vínculo entre acción y reacción. La expectativa de la recompensa se vuelve más importante que la recompensa misma a través de la repetición.
Y todo el mundo se olvidó del propio Skinner, es decir, del factor externo responsable de la aleatoriedad. Pero se puede hacer que no sea aleatorio. Retorcerlo a favor del negocio.
No creerás que los algoritmos de selección de los próximos contendientes al golpe son tan aleatorios como el deseo de Skinner de alimentar a los pájaros, ¿verdad?
Uno de los ejemplos más importantes y obvios es el inicio de la comunicación porque es el cuello de botella que puede alejar al usuario del juego.
Hay dos factores con los que trabaja Tinder: el pretexto para la comunicación (información sobre ti) y la comunicación en sí. El objetivo es minimizar la probabilidad de éxito de la comunicación.
Aquí es donde entran en juego los grandes y poderosos.
Nuevas mecánicas de monetización que afectan al propio proceso
El pago cambia la jugabilidad, y en Tinder, el coste cambia la calidad de la selección. Los algoritmos que gobiernan cuándo se obtiene una selección de calidad con más coincidencias están conectados a la frecuencia con la que se paga. Así que el proceso y la monetización se convierten en uno.
Por cierto, estas mecánicas están patentadas, por ejemplo, por Activision Blizzard y Electronic Arts. Toda la industria de los juegos en línea se basa ahora en ellas. Y esto no es una broma: es dinero de la nada.
En Tinder, se encargan de emparejar a nuevos candidatos en función de tu actividad, perfil, tiempo e intereses, y pago. Son manipuladores y responsables de involucrarte en un proceso permanente de swiping.
¿Cuál es el objetivo? Al principio, los algoritmos de emparejamiento están configurados para mostrarte los máximos resultados. Habrá más coincidencias y nuevos y bonitos perfiles activos en la selección. Los algoritmos se ajustan con precisión y analizan el comportamiento de los usuarios: la frecuencia con la que están en el servicio y la frecuencia con la que responden o escriben mensajes.
En general, el servicio hace todo lo posible para que, al principio, tengas una relación de confianza y puedas ver la eficacia de sus acciones. Todo para que se forme un hábito.
Pero con el tiempo, los algoritmos empiezan a ofrecerte opciones menos adecuadas, animándote así a pagar. Al haber pagado una suscripción, obtienes temporalmente lo que quieres, y los algoritmos empiezan a trabajar de nuevo para ti, pero luego vuelven a pasar el rodillo y así hasta el siguiente periodo de suscripción, lo que te anima a hacer otra compra: superlikes.
La cuestión es que la suscripción no te da el resultado deseado, y el servicio seguirá manipulando tu comportamiento con sus algoritmos de emparejamiento y sus hábitos de mecánica de juego: grinds y cajas de botín.
A este paso, Tinder pronto se convertirá en un auténtico casino, donde conseguirás un usuario aleatorio a cambio de una cuota. Y a cambio de una gran paga, puede que consigas a alguien que te guste. Lo único que ocurre con los casinos online es mucho más fácil: cuando juegas en casinos verificados, como esta página de https://casinosenchile.net/, sabes claramente que las posibilidades de ganar son mínimas. Pero si lo ganas todo, seguro que sacas partido a tu dinero. Con Tinder, es más complicado. Puedes gastar mucho dinero y aun así no encontrar tu amor.